Mi primer viaje de Bikepacking, que me enseñó lo duro y mágico que es viajar en bici.
Tuvo momentos durísimos, estar sentado en una carretera llorando, en la mitad de un desierto, porque extrañas a tu familia, sabiendo que este es un viaje de solo 5 días y que se te aproxima uno de 57, fue una de las experiencias más duras y enriquecedoras que he vivido.
Este viaje se me ocurre un día después de clases, porque me quedaban 5 días libres, entonces pensé, considerando que estoy «cerca de Barcelona», podría ir a alguna ciudad «cerca», y viendo el mapa se me ocurrió Zaragoza, lo que no sabía era que la ruta era 90% desierto, falsos planos infinitos y arena, cultivos, y muy poca gente.
Un viaje que me dejó más que preparado para la maravillosa aventura de 4.000 kilómetros que hice un mes después desde Atenas a Barcelona.